Ya está en marcha la campaña de vacunación antigripal OSPAT 2017
3 mayo, 2017
Como todos los años, ante la proximidad del invierno, OSPAT lanza su campaña de vacunación contra la gripe. Mayores de 65 años, mujeres embarazadas, niños menores de 2 años y personas con enfermedades crónicas conforman los grupos de riesgo que deben vacunarse.
La gripe es una enfermedad viral muy contagiosa que habitualmente se presenta durante los meses más fríos del año. Si bien en general los síntomas desaparecen en una semana sin necesidad de atención médica, en personas con riesgo puede generar complicaciones y provocar una enfermedad grave.
Quiénes tienen que vacunarse
El Calendario Nacional de Vacunación incluye la vacuna antigripal anual para los grupos con mayor riesgo. Es por ello que, a partir de los 65 años, todas las personas deberían aplicarse anualmente esta vacuna, al igual que el personal que se desempeña en instituciones de salud.
Las mujeres embarazadas beben vacunarse en cualquier momento de la gestación. De esta forma, se protege tanto a la mamá como al bebé. En caso de no aplicarse la vacuna durante el embarazo, es importante hacerlo antes de irse de la maternidad.
Los niños que tienen entre 6 y 24 meses deben recibir 2 dosis de la vacuna, con al menos 4 semanas de diferencia. Aquellos niños que recibieron al menos dos dosis de la vacuna antigripal anteriormente, deberán recibir solo una dosis.
También deben vacunarse las personas de entre 2 y 64 años con ciertas enfermedades crónicas como obesidad, diabetes, enfermedades respiratorias o cardíacas, inmunodeficiencias congénitas o adquiridas, pacientes oncohematológicos, trasplantados o personas con insuficiencia renal crónica en diálisis. En estos casos, para recibir la vacuna gratuita deberán presentar orden médica.
Medidas de protección contra la gripe
Además de la vacuna en los casos indicados, hay medidas muy sencillas que todos podemos adoptar para protegernos de la gripe y otras enfermedades respiratorias. Por ejemplo, lavarnos frecuentemente las manos con agua y jabón y, al estornudar, hacerlo en el pliegue del codo o sobre un pañuelo de papel.
Estos simples hábitos ayudan a reducir la circulación del virus, ya que cuando una persona infectada tose o estornuda, las pequeñas gotas de saliva se dispersan en el aire y se transmiten a las personas cercanas que las inspiran. El virus también puede propagarse a través de las manos infectadas, de ahí la importancia del lavado frecuente. Y no hay que olvidar enseñar a los niños a adoptar estos hábitos en la escuela y en el hogar.
Ventilar la casa, no fumar ni dejar que otros lo hagan en lugares cerrados, son también medidas recomendadas para cuidar la salud respiratoria. Al igual que amamantar al bebé en forma exclusiva hasta los 6 meses: esto fortalece notablemente sus defensas.
Los síntomas
Los síntomas de la gripe son inicio súbito de fiebre alta, tos (generalmente seca), dificultad para respirar, dolores musculares, articulares, de cabeza y garganta, intenso malestar y abundante secreción nasal. Si tenés estos síntomas, es importante consultar con el médico y respetar el reposo indicado.
Los síntomas suelen aparecer a las 48 horas de efectuado el contagio y la mayoría de los pacientes se recuperan en una o dos semanas sin necesidad de recibir tratamiento médico. Sin embargo, en niños pequeños, personas mayores y personas con otras afecciones médicas, la infección puede conllevar graves complicaciones, provocar neumonía e incluso causar la muerte.