28 agosto, 2023
La ventana temporal para frenar el cambio climático se está cerrando. Los expertos consideran que está década es la última oportunidad para reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y evitar que nuestro planeta se caliente por encima de los 1,5 grados de media respecto de valores preindustriales. ¿Reforestar? ¿Plantar donde antes no había árboles? ¿Inyectar agua marina en las nubes? Éstas son solo algunas de las ideas que se están considerando seriamente desde la ingeniería climática o, como se la conoce, geoingeniería: tecnologías que prometen enfriar el planeta. Mientras tanto, la temperatura del planeta ya subió 1,1 grados.
¿Qué es la geoingeniería?
Los países no están haciendo los esfuerzos necesarios para frenar el consumo de combustibles fósiles, limitar la deforestación y cambiar algunas formas de producción agrícola, ganadera e industrial, las principales actividades que emiten dióxido de carbono (CO2), metano y óxidos nitrosos, los GEI. Frente a ese escenario, algunos comienzan a pensar en un conjunto de soluciones tecnológicas para combatir el cambio climático, conocidas como geoingeniería.
Pero estas propuestas están rodeadas de incertidumbre sobre los posibles daños colaterales, además de que abren un debate ético y pueden derivar en un nuevo conflicto geopolítico.
Inés Camiloni es climatóloga investigadora de la Universidad de Buenos Aires y el Conicet, experta en geoingeniería y miembro de la Comisión Mundial de Ética en el Conocimiento Científico Científico y la Tecnología (COMEST) de UNESCO. Ella sostiene que para no cruzar el umbral de los 1,5 grados, deberíamos reducir los GEI a razón de 7,6% por año durante esta década. “La realidad es que con las acciones que estamos realizando hasta ahora la temperatura va a superar en forma significativa ese umbral”, señaló en una charla organizada por la Academia Joven de Argentina.
La experta explicó que existe un escenario intermedio, en el cual la temperatura superaría esos 1,5 grados, pero luego se podría enfriar el planeta con alguna estrategia. La ingeniería climática (mal conocida como geoingeniería) podría pensarse como una alternativa.
Se trata de una forma deliberada de manipular a gran escala el ambiente planetario para contrarrestar los efectos del cambio climático antropogénico. Muchos países y empresas piensan que puede ser una posible solución, pero Camiloni entiende que se necesitan más estudios.
Geoingeniería: remoción de CO2
Una de las tecnologías que se pueden utilizar es la remoción del CO2. Se trata del principal gas responsable del calentamiento global y se emite durante la quema de combustibles fósiles en los autos y las centrales eléctricas, por ejemplo. Si se lograra disminuir su presencia en la atmósfera, se reduciría el efecto invernadero y la temperatura bajaría.
Cómo capturar CO2 con ingeniería climática
Existen varias formas de capturar dióxido de carbono del ambiente. Para la remoción de Co2, se puede:
- Reforestar y aforestar. Los árboles necesitan el CO2 del ambiente para realizar la fotosíntesis y crecer. Una de las alternativas es reforestar regiones en donde fueron eliminados bosques y selvas. Otra alternativa más polémica es aforestar, esto es, plantar árboles en ecosistemas donde históricamente no los hubo. Existen grande proyectos de reforestación, aunque son iniciativas a largo plazo.
- Capturar directamente desde la atmósfera. Es un procedimiento más costoso. Busca extraer el CO2 del aire con ayuda de algún catalizador químico. Luego, el gas se comprime y almacena en reservorios geológicos. Por el momento, existen proyectos a pequeña escala y los gobiernos desarrollados están incentivando esta tecnología, según un informe de la Agencia Internacional de Energía (IEA).
- Bioenergía con captura de carbono. Este procedimiento implica el cultivo de biomasa (plantas o árboles) que absorbe CO2. Luego, esa biomasa se quema para generar energía y el CO2 resultante se captura y almacena en reservorios geológicos. Según la IEA, esta tecnología no está tan madura como la captura directa.
Geoingeniería: manejo de la radiación solar
Otra forma de evitar un mayor calentamiento es que el planeta refleje hacia afuera de su atmósfera una mayor cantidad de energía solar que la actual. Estas tecnologías suenan aún más radicales:
- Espejos espaciales. La idea es colocar espejos en órbita alrededor de la Tierra para redirigir la radiación solar lejos de la superficie terrestre. Su implementación es compleja y costosa. También plantea interrogantes sobre la basura espacial y la dependencia continua de la tecnología.
- Blanqueamiento de superficies o nubes. Hay una técnica menos radical que consiste en pintar techos y superficies urbanas con materiales altamente reflectantes. Esto ayudaría a reducir la absorción de calor en áreas urbanas, y disminuiría el efecto «isla de calor» urbano. En cambio, la opción más radical es inyectar agua marina u otras sustancias en las nubes para hacerlas más reflectantes y aumentar su capacidad para reflejar la luz solar (albedo). Se desconocen los impactos que podría tener en el clima y los ecosistemas.
- Inyección estratosférica de aerosoles. Es la más madura. Implica la liberación controlada de partículas como el dióxido de azufre u otras en la estratósfera (entre 10 y 50 km de altura) para que reflejen radiación solar.
Antecedentes alentadores de la inyección estratosférica de aerosoles
Esta tecnología, que imitaría el efecto ya visto de grandes erupciones volcánicas, históricamente han provocado un enfriamiento del planeta con éxito. El ejemplo más estudiado es el del volcán Pinatubo en 1991. Su explosión inyectó cerca de 15 millones de toneladas de dióxido de azufre en la estratosfera. El planeta se enfrió más de medio grado durante los siguientes dos años.
Se trata de una estrategia no tan costosa, si se compara con el impacto económico que generará el cambio climático. Y viable en el corto plazo desde el punto de vista técnico, ya que solo se necesitaría reflejar el 1% de la radiación solar que llega a la Tierra. Sin embargo, se conoce poco sobre sus daños colaterales.
Geoingeniería: simular procesos naturales que liberen pequeñas partículas en la estratosfera para enfriar la Tierra es una de las ideas que se prueban.
Camiloni realizó un estudio con modelos computacionales sobre los posibles impactos en la cuenca del Río de la Plata de la inyección de aerosoles en la atmósfera. “Sin geoingeniería, lo que esperamos es un aumento generalizado de la temperatura en América del Sur, por encima de un grado, mientras que aplicando esta tecnología el aumento de la temperatura se mantendría por debajo de un 1 grado”, señaló en la presentación.
¿Produce alteración en el ciclo del agua?
Se piensa que la inyección estratosférica de aerosoles provocaría, a su vez, un aumento del hasta el 20% en la disponibilidad de agua de la cuenca. Implicaría un incremento en la generación hidroeléctrica. Y los caudales mínimos no serían tan bajos, lo que mitigaría el efecto de las sequías.
Sin embargo, los caudales máximos serían más importantes, por lo que podrían ocurrir inundaciones más severas. “La modificación en el ciclo del agua es el mayor impacto probable de la geoingeniería”, aseguró Camiloni.
Entre otros potenciales impactos se cuentan también el desarrollo de lluvia ácida y un daño en la capa de ozono.
“La reforestación tiene una escala de tiempo más larga, mientras que la inyección de aerosoles es una alternativa más rápida para enfriar el planeta. Sin embargo, el camino siempre debería ser reducir los GEI”, indicó. Un panel de expertos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (que incluyó a Camiloni) también llegó a la misma conclusión.
“Estudiar la ingeniería del clima de nuestro país es central, no porque Argentina vaya a formar parte de estos proyectos, sino porque es una estrategia que ya se está discutiendo seriamente en otros países. Necesitamos herramientas para los debates que se darán en los organismos multilaterales y para tomar decisiones informadas”, señaló la experta al referirse a las tecnologías que prometen enfriar el planeta en una carrera contrareloj.
Cuáles son los impactos del cambio climático
Cabe recordar, que un aumento por encima de 1,5 grados de la temperatura media global tendrá diferentes consecuencias en el planeta. Y estos impactos serán más intensos mientras más nos alejemos de ese umbral. Entre ellos se pueden mencionar:
- Calentamiento global. El mundo será más cálido, pero el calentamiento será heterogéneo con mayor impacto en el hemisferio norte. Habrá más olas de calor, las cuales serán más intensas, se extenderán por más días e impactarán en una mayor superficie.
- Aumento del nivel del mar. Esto ocurrirá por el derretimiento de los hielo polares, pero también porque los océanos aumentan su volumen cuando se calientan.
- Cambio en las precipitaciones. Habrá distorsiones en los regímenes de lluvias. En general se espera que aumenten en las zonas que ya son húmedas y disminuyan en las regiones que ya son áridas.
- Retracción de los glaciares. Este fenómeno ya se está observando en Argentina.
Todos estos impactos traerán consecuencias en la biodiversidad. Se cree que el 50% de las especies de flora y fauna podrían extinguirse si el calentamiento alcanza los 4 grados. Pero también afectará a nuestra civilización de diversas maneras: la salud, el acceso al agua, la seguridad alimentaria, los movimientos migratorios.
Por Lucas Viano @LucasViano
REDACCIÓN PENSAR SALUD
redaccion@pensarsalud.com.ar ¡Escribínos!
Tags: acceso al agua | aforestacion | bioenergía | blanqueamiento de superficies | calentamiento global | cambios en las precipitaciones | capa de ozono | capturar CO2 | ciclo del agua | dióxido de azufre | dióxido de carbono | efecto invernadero | espejos espaciales | gei | geoingeniería | glaciares | huella hídrica | ingeniería climática | intervención climática | inyeccion estratosferica de aerosoles | lluvia ácida | lluvias | manipulacion del clima | reforestación